El condado de Navarro, al sureste de Dallas, estaba ayer bajo agua debido a las intensas lluvias que causaron desbordes y estragos en las carreteras.
Según el reporte meteorológico, el sábado se registraron unos 500 milímetros de agua (unas 20 pulgadas) lo que causó un verdadero caos en el tránsito vehicular y férreo. Un tren de carga fue reportado como descarrilado, sin que hubiera que lamentar víctimas.
Casi todas las carreteras y caminos del condado permanecían cerrados en la noche del sábado y se esperaba que la situación continuara hasta al menos la mañana del domingo.
Comerciantes en Corsicana lamentaron la situación pero se unieron a los residentes en resignación ya que nadie podía moverse o salir a raíz de la situación causada por las torrenciales precipitaciones.
Las autoridades recomendaron precaución a la hora de salir o conducir ya que la red vial estaba afectada por el agua en su totalidad.