Chicago

Policía Van Dyke culpable de homicidio en segundo grado

Y de 16 cargos de agresión agravada por cada disparo que le propinó a Laquan McDonald.

Un jurado alcanzó un veredicto en el juicio contra el oficial de la policía de Chicago, Jason Van Dyke, quien fue acusado de homicidio en el tiroteo fatal del adolescente de 17 años, Laquan McDonald, en 2014.

Van Dyke fue hallado culpable de homicidio en segundo grado y de 16 cargos de agresión agravada por cada uno de los disparos que le propinó a McDonald.

El veredicto: cargos y condenas

  • Culpable: 1 cargo de homicidio en segundo grado con firme intención de matar y herir con un arma de fuego. (Condena de cárcel de 45 años a cadena perpetua)
  • Culpable: 16 cargos de asalto agravado por cada disparo con un arma (Condena de 6 a 30 años de cárcel, cumplir al menos el 85% de la sentencia)

Tras el veredicto, el juez le revocó el derecho a fianza a Van Dyke y este fue arrestado en corte. 

El homicidio en segundo grado, el juez explicó que se considera como uno de primer grado pero con un factor atenuante, y que conlleva una sentencia que va desde la libertad condicional a 20 años de cárcel.

Antes de que se leyese la decisión del jurado, el juez encargado del caso, Vincent Gaughan, pidió a los asistentes a la audiencia que "controlasen sus emociones", petición similar a la que realizó para toda la ciudad por el cardenal de Chicago, Blase Cupich.

Mientras, en el exterior del tribunal, comenzaron las celebraciones por la decisión, así como las solicitudes de dimisión para el alcalde demócrata Rahm Emanuel, quien anunció hace escasas semanas que no buscaría la reelección.

El sonado juicio se llevó a cabo luego de casi cuatro años tras el tiroteo que sacudió a la ciudad y al país.

Este mes, Laquan McDonald habría cumplido 21 años.

Transfondo del caso

Van Dyke enfrentó seis cargos de homicidio en primer grado después de más de un año de que baleara al adolescente 16 veces en el sureste de la ciudad. Se declaró no culpable.

Los abogados de Van Dyke mantuvieron que el oficial fue acusado erróneamente indicando que actuó bajo la ley cuando baleó al menor, quien en ese entonces era un criminal convicto que huía del lugar de un crimen.

En el juicio, el jurado vio el tiroteo captado por la cámara de una patrulla; imágenes gráficas de la autopsia de las más de una docena de heridas en el cuerpo de McDonald; un video que recrea el tiroteo desde la perspectiva de Van Dyke; y otro video que muestra que los 16 tiros fueron disparados en menos de 14 segundos.

También escucharon testimonio de varios oficiales de la policía de Chicago y de testigos presenciales; vieron el arma de Van Dyke; y observaron a especialistas del FBI hacer una demostración del tiroteo.

Van Dyke indicó que abrió fuego esa noche para protegerse y proteger a otros oficiales.

El tiroteo y la subsecuente publicación del video de la patrulla provocaron protestas masivas e importantes cambios en la ciudad en años posteriores.

Una investigación federal iniciada tras que se hiciera público el video halló fallas sistemáticas en la entrega de cuentas y el entrenamiento del Departamento de la Policía, así como violaciones a los derechos civiles por parte de la policía incluyendo parcialidad racial y tendencia al uso excesivo de las fuerza.

La municipalidad acordó realizar reformas profundas de la policía bajo estricta supervisión de una corte federal. 

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