Abarca y Pineda aseguran su inocencia

El excalcade de la ciudad de Iguala, y su esposa, hablaron desde la cárcel, donde llevan casi un año presos, y aseguraron que son inocentes.

Los principales acusados de ordenar el ataque contra los normalistas de Ayotzinapa, que culminó con la desaparición de los 43 estudiantes, rompieron el silencio.

El excalcade de la ciudad de Iguala, y su esposa, hablaron desde la cárcel, donde llevan casi un año presos, y aseguraron que son inocentes.

José Luis Abarca está en una prisión de máxima seguridad en el estado de México, mientras que María de los Ángeles Pineda en otra en Nayarit.

En entrevista publicada por la revista Proceso, al preguntarle si ordenó la muerte de los estudiantes, Abarca dijo: “De ninguna manera. Eso sería algo espantoso”.

La noche del 26 de septiembre de 2014, policías municipales dispararon contra los estudiantes, cuando llegaron a Iguala.

Según la Procuraduría General de la República (PGR), el matrimonio dio la orden, y tenía vínculos con el grupo criminal Guerreros Unidos.

Pineda dijo en la entrevista que “yo soy inocente de cualquier cosa que se me acuse. Yo jamás he cometido ningún delito”.

Luego del ataque, la pareja desapareció por más de un mes, hasta que fue detenida en la Ciudad de México.

Abarca y Pineda podrían ser sentenciados a muchos años de prisión.

Según la versión de la PGR, los policías municipales capturaron a los estudiantes, que luego habrían entregado a sus verdugos de Guerreros Unidos.

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