Obama llega a Grecia en su última gira presidencial

ATENAS, GRECIA - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo en Atenas que trabaja por que su sucesor, Donald Trump, le siga dando la misma importancia que los demócratas a las relaciones transatlánticas.

"Quiero reafirmar que el tema de la OTAN es muy importante y queremos asegurar la continuación de esta política durante el traspaso a la nueva presidencia electa de los republicanos", dijo Obama en una primera declaración al ser recibido por el presidente griego, Prokopis Pavlópulos, al comienzo de su visita a Atenas.

Obama destacó la importancia de Grecia dentro de esta alianza y agradeció el apoyo que ha dado a los buques de la OTAN en el Egeo en la lucha contra el terrorismo.

En una entrevista concedida al dominical Kathimeriní en vísperas de su visita, Obama había recalcado que, pese a las dificultades económicas que atraviesa, Grecia es uno de tan solo cinco países de la OTAN que destinan el 2% de su PIB a defensa.

En su entrevista con Pavlópulos, el presidente de EEUU resaltó además los esfuerzos que ha hecho Grecia para superar la crisis económica, donde, dijo, ha hecho ya grandes progresos, si bien "todavía queda un largo camino" que recorrer.

"Grecia hizo frente a muchos retos en los últimos años. En el contexto de una coyuntura económica desfavorable el pueblo sufrió mucho. La situación mejora y ayudaremos en este proceso, pero hay mucho camino que recorrer", destacó.

El presidente afirmó que durante la reunión que mantendrá en Berlín -próxima etapa de su última gira internacional- con otros líderes europeos, les animará a hacer políticas abocadas a impulsar el crecimiento y a dar la misma oportunidad a todos, especialmente a la juventud, y en particular a la juventud griega.

Asimismo, elogió el modo en que los griegos han gestionado la crisis de refugiados y recalcó que es un problema que ningún país puede resolver por si solo. "Es una cuestión que afecta a todos", dijo.

Por su parte, Pavlópulos reafirmó que Grecia está comprometida con la Unión Europea y la eurozona, así como con la integración europea, y es contraria a todo fenómeno fóbico y de falta de solidaridad que han puesto de manifiesto otros países. Tras su reunión con el presidente griego, Obama se reunirá con el primer ministro, Alexis Tsipras.

CHICAGO - JUNE 07: The Chicago skyline with Lake Michigan in the background are visible from atop the Sears Tower Skydeck observation deck June 7, 2006 in Chicago, Illinois. Completed in 1973, the Sears Tower at 1,450 feet tall is the tallest building in the US and a popular location for tourists. (Photo by Tim Boyle/Getty Images)
Recientemente, el alcalde de Chicago confirmó que la ciudad es "santuario" para inmigrante, por ejemplo.
Para muchos, todavía es un misterio qué significa que una ciudad sea santuario y cómo se traduce tal calificación en la calidad de vida de quienes a ellas emigran.
Las ciudades santuario son lugares que resultan más favorables para la reinserción de inmigrantes y donde consiguen más apoyo de la comunidad.
Su nacimiento está atado a un movimiento de la década de los '80, en el momento que algunos sitios de Estados Unidos recibieron a nuevos habitantes que huían de la violencia y persecución en sus países de origen y que infructuosamente trataban de obtener protección estadounidense a través de la figura del asilo político.
En ese entonces, conceder el asilo representaba el reconocimiento implícito de las violaciones a los Derechos Humanos que eran cometidas por gobiernos aliados de Estados Unidos en Centroamérica.
La semilla del movimiento se sembró cuando en 1982 una iglesia en Tucson le dijo al gobierno que estaba dispuesta a violar leyes migratorias para ser un “santuario” que brindara protección a quienes, sin documentos, buscaban una nueva vida en Estados Unidos.
Esa fue la primera de cientos de congregaciones que abrieron sus puertas a partir de esa decisión, muchas de ellas porque veían en el extranjero la imagen del “Cristo sufriente”.
El pionero de esta iglesia de Tucson fue el reverendo John Fife, quien tuvo claro desde el principio que las autoridades no podían irrumpir en centros religiosos.
San Diego, Los Angeles, San Francisco, Miami, Filadelfia, Chicago, Seattle, Houston, Phoenix, Austin, Dallas, Washington D.C., Detroit, Salt Lake City, Minneapolis, Baltimore, Portland, Denver y New York City son solo algunos de los sitios donde proliferaron los templos que fungieron como santuarios y que hoy tienen alta concentración de población extranjera.
La categorización de "ciudad santuario" puede darse por la decisión de una localidad de asumir posturas específicas frente a la inmigración indocumentada o puede ser también producto de reglas no escritas pero que en la práctica favorecen al inmigrante
Por ejemplo, Chris García, alcalde de Cudahay en Los Ángeles busca formalizar su condición de santuario a través de una medida que emitió y quien dijo “con esto le decimos específicamente a ICE que conocemos sus leyes para detener indocumentados, pero Cudahy no va a gastar un centavo cooperando en las deportaciones”.
En medio de la controversia, voces que se oponen y apoyan a las ciudades santuarios se han hecho escuchar. El presidente electo Donald Trump dijo que son "una desgracia", mientras el congresista Luis Gutiérrez dijo que son la respuesta a un sistema de inmigración que está "roto".
La discusión sobre si la protección que ofrecen contraviene leyes o afecta a las poblaciones sigue en curso.
El Senado discute actualmente una propuesta para recortar los fondos que reciben y para obligarle a cooperar con las autoridades federales.
También la Cámara Baja trabaja su propio proyecto de ley. En la foto, inmigrantes separados se reúnen en la frontera con México.
En un estudio reciente de Rasmussen Report, se dio a conocer que 62% de los encuestados están en contra de las ciudades santuarios y 58% es proclive a que se eliminen los fondos federales que reciben. Estas opiniones son más fuertes entre quienes se identificaron como prorepublicanos. EN la imagen, inmigrantes a punto de ser deportados.
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