JOURDANTON, Texas – El condado Atascosa se deshizo de la orden que obligaba a sus residentes a usar mascarillas en lugares públicos para evitar una propagación masiva de COVID-19, pero con algunas excepciones.
Y es que las personas todavía deberán usar los tapabocas en las escuelas, a la hora de votar, en las cortes del condado, en los bares, y en cualquier otro establecimiento que requiera a sus empleados y clientes traer una cubierta facial.
La enmienda entró en efecto este lunes al mediodía después de que el condado registrara 14 días consecutivos con menos de 20 casos de COVID-19 activos, como lo requiere el Departamento de Manejo de Emergencias de Texas.
Adicionalmente, aunque la orden de uso de mascarillas haya sido eliminada, las medidas de distanciamiento social siguen en efecto.
Al igual, cualquier otra orden firmada por el gobernador Greg Abbott en cuanto a la emergencia sanitaria debe ser respetada, incluyendo aquellas pertinentes a los restaurantes, reuniones públicas y privadas, iglesias, y cines, entro otros.
Cualquier violación a la orden vigente podría acarrear una multa de hasta $1,000 y hasta 180 días de cárcel.
Atascosa así se unió a otros 67 condados de Texas que ya no requieren el uso de mascarillas.
