SAN ANTONIO – El condado Bexar registró una de sus peores semanas en su lucha contra el nuevo coronavirus en estas vacaciones del Día de Acción de Gracias.
Del domingo 22 hasta el domingo 29 de noviembre, se documentaron 5,984 casos nuevos de COVID-19 en el condado, incluyendo dos días consecutivos con más de 1,000 casos. No se habían registrado cifras de contagios tan altas desde finales de julio.
Asimismo, un total de nueve pacientes fallecieron a causa de la enfermedad durante el mismo periodo de tiempo.
En total, el condado Bexar ha registrado 80,057 casos y 1,357 muertes por COVID-19 desde que comenzó la pandemia en marzo.
Ante el incremento de casos en la última semana, el juez del condado Bexar, Nelson Wolff, y el alcalde Ron Nirenberg, de San Antonio, ordenaron un toque de queda desde las 10 p.m. del Día de Acción de Gracias hasta las 5 a.m. de este lunes.
Los funcionarios esperaban que las restricciones ayudaran a mitigar la propagación del virus durante el fin de semana feriado, donde las personas suelen reunirse para celebrar en familia, viajar, y salir de compras por las ofertas del Viernes Negro.
Sin embargo, un grupo de residentes inconformes se manifestó frente al Álamo la noche del sábado en contra del toque de queda, argumentando que la medida era inconstitucional.
Los oficiales de la salud locales mostraron preocupación ante la posibilidad de que las fiestas decembrinas puedan empeorar la situación de la pandemia en el condado Bexar.
Mientras tanto, se espera que el impacto del Día de Acción de Gracias se vea reflejado en las cifras de COVID-19 en las próximas dos semanas.
