CONVERSE, Texas – Una persecución policial tuvo un final inesperado luego de que las autoridades capturaran al sospechoso: un niño de 10 años.
La persecución comenzó este martes poco después de la 1 p.m. en la comunidad de Converse cuando un policía local vio a una camioneta siendo conducida erráticamente.
De acuerdo a un comunicado de prensa, el oficial siguió al vehículo y presenció cuando éste chocó contra un auto estacionado frente a una casa, pero continuó hasta detenerse a unas cuadras más adelante.
Una vez el policía salió de su patrulla, el menor se echó de reversa, impactando el vehículo del uniformado antes de darse a la fuga nuevamente, según el comunicado.
Varios oficiales de la Oficina del Alguacil del Condado Bexar se unieron a la persecución y colocaron clavos para hacer estallar las llantas de la camioneta; sin embargo, el niño viró para esquivarlas, entrando en los carriles contrarios y finalmente chocando contra un árbol y terminando atrapado en una zanja, informó la policía.
El sospechoso después habría intentado escapar a pie, aunque fue capturado rápidamente por las autoridades.
Los investigadores después descubrieron que la camioneta que conducía el niño había sido reportada como robada.
El menor ahora enfrentaría un cargo por evadir el arresto, mientras que no se reportaron personas heridas durante la persecución.