SAN ANTONIO – El condado Bexar registró 1,210 casos nuevos de COVID-19 este lunes, elevando la tasa de positividad de un nueve por ciento a un 15.7 por ciento.
Ante el preocupante repunte de casos que se ha visto en el condado en las últimas semanas, los funcionarios locales anunciaron que aquellos bares que no tengan servicio de comida deberán cerrar a partir de este jueves a las 11 p.m.
“Los únicos que no están sirviendo comida serán obligados a obtener un permiso de alimentos o tener un contrato con un proveedor que les suministre comida”, explicó el juez Nelson Wolff. “Hablé con la [Comisión de Bebidas Alcohólicas de Texas] y les darán tiempo si deciden hacer eso, pero si no, tendrán que cerrar”.
Esto quiere decir que solo los establecimientos nocturnos que, a parte de bebidas alcohólicas, vendan comida podrán seguir operando.
El Distrito de Salud Metropolitano de San Antonio, conocido en inglés como Metro Health, elevó el nivel de riesgo de contagio en las escuelas a “alto”.
Según Metro Health, el promedio de contagios diarios ha sido de 993 en los últimos siete días, y uno de cada seis pacientes en los hospitales del condado está enfermo con COVID-19.
“Tenemos que seguir usando las mascarillas, lavándonos las manos y evitando las reuniones en interiores con personas que no vivan en nuestros hogares”, tuiteó el alcalde Ron Nirenberg, de San Antonio.
Se espera que las infecciones del nuevo coronavirus sigan en aumento debido a las fiestas decembrinas.
