SAN ANTONIO – Varios funcionarios del condado Bexar y la Ciudad de San Antonio respondieron a dudas de la comunidad sobre las ordenes ejecutivas que obligan a las personas a quedarse en su casa y trabajar de manera segura.
Las medidas entraron en vigor este martes a las 11:59 p.m. y solo permiten salir por motivos de salud y seguridad, para comprar suministros esenciales, para trabajar en alguna de las industrias exentas a la orden o para realizar actividades físicas como caminar, correr o andar en bicicleta, pero siempre practicando el distanciamiento social.
Los residentes del condado Bexar que sean hallados violando la medida podrían enfrentar una multa de hasta $1,000 y hasta seis meses en la cárcel, aseguró el juez Wolff.
“La policía de San Antonio no le detendrá si está fuera de su hogar”, dijo Elizabeth Provencio, abogada de la Ciudad de San Antonio.
Jeff Coyle, director de relaciones gubernamentales y públicas de la Ciudad, también dijo que "no necesita una un permiso para comprobar que trabaja para uno de los negocios que tienen permiso de permanecer abiertos".
"Esperamos que el publico siga la orden de quedarse en casa, y nuestros esfuerzos de ejecución [de castigos] se enfocaran en los negocios que deberían estar cerrados, y que las medidas de distanciamiento social sean aplicadas por aquellos que sigan abiertos", dijo Coyle.
Los únicos negocios que pueden seguir operando son aquellos relacionados a la salud, el gobierno, compañías de infraestructura, transporte, gasolineras, supermercados, y restaurantes, entre otros.
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