CIUDAD DE MÉXICO - El compromiso de campaña de Andrés Manuel López Obrador de no usar el avión presidencial y venderlo se ha convertido en un dolor de cabeza para el gobierno mexicano que ve en la nave una muestra de "administraciones faraónicas".
Tras más de un año en venta en la sede de Boeing en Estados Unidos, donde la ONU lo valuó en $130 millones, el TP-01 donde supuestamente sería rifado, pero aunque el sorteo sí se hará, la nave permanecerá en poder de la Defensa Nacional con el propósito de rentarlo.
De acuerdo con el titular de la Defensa, el general Luis Cresencio Sandoval, una hora de vuelo en ese aeronave costaría 250,000 pesos, (unos $13,316), según los costos de operación proyectados por el gobierno de López Obrador con base en 800 horas de vuelo al año.
Para determinar el costo tomaron en cuenta el consumo de combustible, los sueldos de la tripulación, el seguro, el mantenimiento de la aeronave durante un año, el adiestramiento de los pilotos que lo vuelan y la actualización de software de los sistemas de a bordo de la nave, incluyendo el internet satelital.
Así, de acuerdo a las proyecciones anuales, para combustible requeriría 70 millones de pesos (unos $3 millones 728,670); el suelo de la tripulación, 4 millones de pesos ($213,066); póliza de seguro, 50 millones de pesos ($2 millones 663,336) y mantenimiento, 57,600 millones de pesos ($3 millones 068,163)