El hombre es un migrante hondureño y fue golpeado por policías estatales de Celaya, Guanajuato, en el centro de México, tras resistirse a un arresto, y todo quedó captado en un video.
Un peatón captó las imágenes en las que se aprecia a una mujer que ruega a gritos a los uniformados que no se lleven al padre de su hija.
"Es una falta administrativa; él no te está molestando", grita la mujer.
Las autoridades locales reconocieron que los golpes no eran necesarios; sin embargo, el migrante cometió la falta de pedir limosna en calles del municipio de Celaya.
"Se va a revisar la situación con los elementos que se ven que participan en el video", dice José González, secretario de Seguridad.
Mientras, a cientos de millas, en el estado de Chiapas, lugar donde se encuentra la caravana de migrantes, ocurrió una situación similar.
Ahí, agentes de Migración también usaron la fuerza para detener a dos ciudadanos hondureños, quienes presuntamente portaban un cuchillo.
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Además, en un operativo se aseguró a un grupo de más de 200 centroamericanos quienes avanzaban por carretera a la altura del municipio de Frontera Hidalgo.
"Hubo una redada fuerte con agentes de Migración", asegura el activista Irineo Mujica.
Se estima que de los migrantes que ingresaron a México, 1,699 han solicitado asilo político, principalmente son mujeres, niños y adolescentes.
Andrés Rozental, el exsubsecretario de Relaciones Exteriores, considera que las autoridades mexicanas aún no tienen definida una estrategia para resolver la crisis migratoria.
"Creo que es una política ambivalente; sí hay presión del gobierno de Estados Unidos, sin duda", afirma Rozental.
La caravana de migrantes avanzó un poco más el viernes. Ahora descasarán en Aarriaga, Chiapas. El plan es visitar la capital mexicana para después dirigirse a la frontera norte, que aún está a semanas de distancia.
