La administración del Presidente Obama dijo el miércoles que no apelará ante el Tribunal Supremo la decisión de la Corte de Apelaciones que mantuvo el bloqueo al programa de DAPA y la extensión de DACA, alivios migratorios que habrían beneficiado a unos cinco millones de indocumentados.
Tras analizar todas sus opciones, el Departamento de Justicia anunció que concentrará todos sus esfuerzos en defender la constitucionalidad de las acciones ejecutivas de Obama, o sea, los méritos del caso, durante una audiencia de la semana del 6 de julio.
La audiencia tendrá lugar en la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito, la misma que el martes rechazó suspender el bloqueo temporal a los programas de DACA expandido y DAPA.
Algunos creen que la Casa Blanca subestimó los retos legales y políticos que representaban las acciones ejecutivas tomadas por Obama.
Los defensores de los inmigrantes instan a los indocumentados a continuar preparándose para el programa que, dicen, será implementado tarde o temprano.
La Casa Blanca volvió a reiterar el miércoles que quienes se beneficiarían de estos programas no son prioridad para la deportación.