SAN ANTONIO - Las fotos que se comparten en las redes sociales de los niños en su primer día de clases podrían ponerlos en situaciones peligrosas, según un detective.
En algunos casos los datos como el nombre de la escuela, su dirección y la edad del menor quedan expuestos ante personas mal intencionadas que se dedican a espiar en las plataformas digitales, según Daniel Carmona.
Ante ese panorama, se recomienda a los padres que ajusten los controles de seguridad en las plataformas donde publican la información.
El objetivo es, según el detective, evitar que depredadores sexuales tengan acceso a dicha información.
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Por otro lado, los padres deben entender que pierden el control sobre las fotos desde el momento en que las publican, de acuerdo con educo, organización internacional que promueve la protección infantil.
Otra recomendación es evitar que se pueda reconocer al menor. Es más seguro compartir imágenes en las que estén de espaldas o que se le vean solo las manos.
Por último, hay que tener precaución con el texto que acompaña la foto para no revelar detalles que arriesguen la privacidad del menor.
