SAN ANTONIO - Este lunes será el plazo para que los comercios cumplan con la orden ejecutiva de los cubrebocas obligatorios. Mientras tanto, una familia lamenta que su ser querido haya contraído el nuevo coronavirus supuestamente trabajando.
Los comercios se verán obligados a pedirle a los clientes que antes de entrar usen un cubrebocas, orden que el padre de un joven que trabaja en un bar dice siempre debió de ser obligatoria. Ahora su hijo lucha por recuperarse del COVID-19.
Rogelio Salinas contó, con un nudo en la garganta, que su hijo Roberto, de 27 años, comenzó a presentar síntomas hace dos semanas. Fue al hospital para recibir atención médica. Sin embargo, de ahí ya no ha podido salir.
“Ya tengo ocho días sin verlo, o de hablar con él”, dijo el padre.
Salinas cree que Roberto pudo haber contraído el virus en su lugar de trabajo, un centro nocturno al oeste de San Antonio. Lugar en donde, según Salinas, el dueño y otro empleado, junto a sus esposas, también dieron positivo al virus.
Por eso, dijo no estar de acuerdo con la apertura de los negocios en medio de la pandemia.
Roberto se encuentra conectado a un respirador artificial luchando por su vida, aunque para los doctores los recursos se están terminando.
Mientras tanto, su padre y su familia siguen rezando por su pronta recuperación.
