SAN ANTONIO - San Antonio y el centro sur de Texas se enfrentan al riesgo de recibir granizo mayor al tamaño de una moneda de 25 centavos este viernes en la noche con la llegada de posibles tormentas severas en la región.
Según el Servicio Nacional de Meteorología, existe un riesgo de nivel 1 a 2 de 5 de tormentas severas principalmente entre las 7:00 p.m. de esta tarde y las 4:00 a.m. del sábado. El granizo de gran tamaño es la principal amenaza, pero también es posible que durante la noche se produzcan vientos dañinos y no se descarta la posibilidad de un tornado aislado.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo San Antonio aquí.
Asimismo, según el pronóstico del Servicio Nacional de Meteorología, existe un riesgo marginal (nivel 1 de 4) de lluvias excesivas que provoquen inundaciones en algunos sectores del centro de Texas.
¿Cómo se forma el granizo?
El granizo es uno de los efectos de la naturaleza que nadie quiere experimentar debido a los fuertes daños que puede causar, incluso la muerte. Los daños no solo son al vehículo al cual deja con un mal aspecto, también puede ser al techo de las viviendas.
Podría ser aún más perjudicial para las personas si no tienen donde buscar refugio mientras estos pedazos de hielo caen del cielo.
Para que se genere el granizo es necesario una corriente de aire ascendente cargada de humedad. Esta humedad, a medida que va ascendiendo, se condensa y al llegar a niveles medios de la atmósfera se congela.
Otras noticias:
Estas gotas, además de congelarse, se van pegando unas a otras. El resultado es que el tamaño del granizo sigue creciendo.
Mientras la corriente de aire se mantiene más fuerte que el peso del granizo, el pedazo de hielo sigue flotando.
Una vez la corriente de aire se debilita por el efecto del peso y la gravedad, el granizo cae al suelo.
Un aspecto importante es que mientras más tiempo el granizo se mantenga flotando, más grande se va haciendo. Por esta razón es que puede llegar a ser del tamaño de una toronja o, en casos más raros, mucho más grande.
