Mickey Mouse será el protagonista de varias producciones audiovisuales de terror ahora que su primera versión presentada en 1928 ha pasado a ser de dominio público en Estados Unidos.
Según el medio especializado Variety, el cineasta Steven Lamorte dirigirá una comedia de terror basada en 'Steamboat Willie', el cortometraje en el que el ratón de Disney hizo su primera aparición en 1928.
La producción de la película de Lamorte comenzará en primavera y tratará sobre un sádico ratón que atormentará a un grupo de desprevenidos pasajeros de un ferry.
Mickey también será el protagonista de otra película de terror slasher titulada 'Mickey’s Mouse Trap', sobre un grupo de amigos adolescentes que son aterrorizados por un asesino que usa la máscara del popular ratón para perseguirlos.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo San Antonio aquí.
El primer adelanto de la cinta fue publicado en Youtube el 1 de enero por el actor y escritor del filme Simon Phillips.
La historia versa sobre el cumpleaños número 21 de Alex, a quien sus amigos visitan mientras trabaja en el turno de noche de un salón de arcade y quienes tendrán que sobrevivir al juego que el asesino enmascarado vestido de Mickey Mouse decide jugar con ellos.
La película ha sido rodada, editada y dirigida por Jamie Bailey y escrita por Phillips y cuenta con las actuaciones de James Laurin, Nick Biskupek, Mireille Gagné y Damir Kovic, entre otros.
Pero el uso de Mickey Mouse en una faceta terrorífica no se limitará a producciones cinematográficas.
El ratón ya fue fuente de inspiración de un videojuego inspirado en 'Steamboat Willie' que lleva por nombre 'Infestation 88' que muestra a un Mickey Mouse transfigurado y que según el adelanto publicado el 1 de enero trata sobre exterminadores de ratas.
El fenómeno de convertir a personajes infantiles en seres malvados ya había sucedido con la liberación de los derechos de autor del cuento A. A. Milne 'Winnie the Pooh'.
El director británico Rhys Frake-Waterfield transformó al oso amistoso en un asesino que busca venganza de su dueño, Christopher Robin, en el filme de terror slasher 'Winnie the Pooh: Blood and Honey' (2023).